“Saveiro” es lo término utilizado para designar las diferentes tipos de barcas, que son construidas solo en madera.
En los “saveiros” mas antiguos, los originales, todavía se observa esta característica , así que los clavos aún son también en madera.
Conocido entre los demás como lancha, el “saveiro” es un pequeño buque de cubierta abierta, con cerca de 5-6 metros de longitud, y trabajando conjuntamente con una lancha de cerco, cogían caballa y jurel, al través de la arte de cerco.
En este arte, eran usadas redes de cerco, con la finalidad de pescar el jurel y la caballa, a través del cebo de pasta de sardina y de un foco de luz. La redes eran lanzadas al agua entre los dos buques de pequeño porte , un “saveiro” y una lancha de cerco, cada uno tripulado por 4-5 hombres. Todo el proceso era hecho a la vela.
Los “saveiros”, en general tenían una vela latina (de forma triangular), pero algunos entre ellos tenían una cangrejera (de forma quadrangular). Su construcción primitiva y medieval tenia como objetivo maximizar la aerodinámica, la navegabilidad y la estabilidad, tirando provecho de su materia prima, la madera.
Sus colores son características y populares, así que las más comunes son: el azul, rojo, blanco y amarillo.
Hoy aún es orgulloso el pescador que tiene un “saveiro”, pero ya no son utilizados para pescar. Adaptados a los tiempos corrientes, con un motor fuera borda, todavía sirven para colorear los canales de la Ria Formosa y para dar a conocer la Reserva Natural.
Con el comienzo de la nueva época, Formosamar esta empezando las reparaciones en estos ancianos del mar, que por ser construidos en madera, necesitan de reparaciones y pintura frecuentemente.
El primer paso es el secado del casco, seguido del lijado de la pintura antigua.
Por fin la aplicación de la nueva pintura y el anti-vegetativo, para devolverlo nuevo al agua.